Después de que el presidente chino, Xi Jinping, lamentara que las redes sociales e Internet se utilicen en todo el país para hacer proselitismo religioso, se ha anunciado recientemente que pronto se aplicarán nuevas restricciones; medidas que impedirán gravemente el acceso de los ciudadanos chinos a los contenidos religiosos. Está previsto que estas nuevas medidas entren en vigor el 1 de marzo de 2022.
Con el aumento de las restricciones, sólo aquellos que hayan obtenido una "Licencia de Servicio de Información Religiosa en Internet" podrán publicar contenidos religiosos en línea. Sin embargo, la licencia sólo se pondrá a disposición de cinco grupos religiosos autorizados, cuyos contenidos de mensajería estarán estrictamente controlados. Sus sermones y enseñanzas sólo podrán emitirse tras una evaluación que garantice que los mensajes no tienen fines de proselitismo, sino que promueven suficientemente los valores socialistas del gobierno.
Las nuevas restricciones establecen que los colegios y universidades religiosas sólo pueden proporcionar material a sus propios alumnos, y cualquier intento de difundir contenidos religiosos a menores dará lugar a la cancelación de las licencias. Cualquier persona u organización que no tenga licencia no podrá difundir ningún contenido religioso ni siquiera aludir a la religión. Además, todas las imágenes y contenidos relacionados con ceremonias religiosas, como el culto o los servicios de bautismo, estarán estrictamente prohibidos.
La oposición a los grupos religiosos no registrados se ha intensificado en los últimos años en toda China. El aumento de estas medidas altamente restrictivas, incluidas las próximas políticas de Internet, puede utilizarse como una herramienta más para imponer acciones legales contra quienes no promueven activamente la agenda del Partido Comunista Chino.
Oremos por la audacia continua de los creyentes en China que buscan seguir los pasos de Cristo en medio de estas políticas gubernamentales represivas.
Oremos que el Espíritu Santo de Dios guíe los corazones y las mentes de cada creyente para que puedan determinar los mejores medios para cumplir con la Gran Comisión de Cristo, y así, en última instancia, obedecerle alcanzando a otros con el mensaje del Evangelio.
Oremos al Señor que también toque los corazones del presidente Xi Jinping y sus asesores para que se den cuenta de la inutilidad de su oposición, que concedan la libertad religiosa a todos los ciudadanos y que permitan a los creyentes compartir su fe libremente.
Fuentes: VM-Canadá - 6.1.2022, ChinaAid, Bitter Winter; Redacción: VM-Ar
Para más información sobre la persecución de los cristianos en China:
https://lavozdelosmartires.com.ar/site/index.php/noticias/noticias-por-pais/104-china
