La situación está empeorando

Desde septiembre de 2006, cuando se había firmado un tratado de paz, los talibanes tenían un santuario en el noroeste de Pakistán. Sin embargo, luego de que el gobierno aplastara una rebelión radical en Islamabad en julio de 2007, los talibanes pusieron fin a este tratado y comenzaron una ofensiva contra el gobierno, el ejército y la policía. El 18 de octubre, 138 civiles murieron tras un solo ataque terrorista en el contexto de esta ofensiva talibán. 
En el noroeste de Pakistán, un número aproximado de 1000 cristianos está sufriendo una persecución sin precedentes, e incluso la muerte.

Sucedieron varios ataques suicidas en Punjab. El presidente complicó la situación cuando el día 3 de noviembre declaró la ley marcial. El gobierno, de apariencia pro occidente, está en peligro de caer en manos de los rebeldes musulmanes. El hecho que la ex primera ministra Bhutto, también pro occidente, regresara recientemente a Pakistán luego del exilio, parece haber complicado aún más la situación. Ser pro occidente es considerado por los musulmanes como una traición a la causa del Islam; y tomando en cuenta que el 96 % de la población es musulmana, vemos que la situación es realmente critica. 
En la mencionada región del noroeste de Pakistán, un gran número de soldados se ha entregado a los insurgentes, sin ofrecer resistencia alguna; esto demuestra que los soldados del ejército gubernamental están en conflicto consigo mismo en cuanto a sus convicciones islámicas. Este conflicto proviene por el hecho de que han sido enseñados a lo largo de varios años, que los jihadistas islámicos representarían una fuerza para el bien. Y ahora que deben luchar contra ellos, muchos de los soldados y también sus superiores prefieren desobedecer al gobierno actual, que aún está aliado a los - por ellos tan odiados - poderes occidentales.

Conocido por sus hermosos paisajes de montañas y lagos, el valle de Swat, en el norte del Punjab y cerca de la frontera con Afganistán, ha dejado de atraer a los turistas desde el momento en que el clérigo y líder musulmán radical al estilo taliban, Maulana Fazlullah, declaró la guerra al gobierno regular en el mes de julio (2007). Sus seguidores han bombardeado negocios que venden videos, cerraron escuelas para niñas, obligaron a las mujeres a cubrirse plenamente en público y amenazaron a los cristianos locales con represalias si no se convierten al Islam. Maulana Fazlullah intenta establecer un estado islámico aplicando la ley islámica sharia. Los eventos en Swat han alarmado a las autoridades de Pakistán, ya que es la primera insurgencia islámica grande.(10. 11. 07)

Las elecciones del día 18 de febrero de 2008 demostraron que el pueblo paquistaní está harto de la política pro-occidental del actual presidente Musharraf, y muestran una fuerte inclinación favorable hacia los militantes radicales que amenazan con derribar a todas las instituciones democráticas de este país, seguramente con consecuencias aún más dramáticas para la minoría cristiana.

A causa de las continuas luchas entre los Talibanes y los militares paquistaníes en el valle de Swat las familias cristianas huyen de la violencia a otras partes del país. Se estiman que se trata de casi 1.5 millones de personas entre cristianos y otras, quienes se han refugiados. La mayor parte de los desplazados están en refugios temporales más bien pracarios y el número de familias que llegan está aumentando con cada día que pasa. Los cristianos del valle Swat son particularmente necesitados de ayuda debido a la gran discriminación precisamente por ser cristianos. Algunas familias han tenido que huir del valle a pie pues no tenían ningún dinero para el transporte, tampoco podían hacer ahorros antes de escapar el área de esta guerra devastadora. Los cristianos paquistaníes, que son a menudo jornaleros pobres, son particularmente vulnerables en el. (Fuente Barnabas Found 20. 5. 09)

  • Oremos por la nación paquistaní para que no caigan bajo el control de extremistas musulmanes.
  • Oremos por los cristianos, y en particular por los que viven en el distrito de Swat, que en este momento está bajo el control de los talibanes y en donde hay guerra entre militantes islámicos y las fuerzas del gobierno.
  • Oremos a Dios por la protección de Su pueblo, que pueda no sólo ser preservado como un remanente fiel, dirigido por Jesucristo, en esa zona de conflicto, sino que pueda llevar mucho fruto para el Reino de Dios. 

Fuente: Iglesia En Marcha y CuttingEdge,redacción VM-Argentina 10.11.07

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