Septiembre 2005 

Según informes recibidos por Christian Aid, en toda India los misioneros locales han sufrido una serie de ataques físicos, amenazas e intimidación a manos de los hindúes extremistas nacionalistas.

Mucha de esta persecución está basada en la retórica promulgada por unos pocos políticos y líderes hindúes radicales; lo que ha ocasionado que en diferentes partes del país se susciten ataques, tanto en forma eventual como aquellos bien organizados. Según la información de un ministerio local, el Pastor Letthang quien es uno de sus misioneros fundadores de iglesias que trabaja en el estado de Tripura, al norte de la India, fue brutalmente golpeado por un grupo de extremistas de esa localidad.

Estos veían a las iglesias que él fundaba como "un reto". 

El líder de otro ministerio informó que días atrás, en el asediado estado de Bihar, cinco misioneros que estaban repartiendo literatura cristiana, fueron sorpresivamente llevados hasta un callejón en donde fueron brutalmente golpeados por aquellos que se oponen a su ministerio. Afortunadamente, un ciudadano hindú intervino y pudo detener la golpiza.

En el mismo estado de Bihar, el pasado 31 de agosto de 2005, el centro de operaciones de un ministerio local también fue atacado. Al respecto su líder dijo: “frente a nuestro centro, un grupo de jóvenes realizó una manifestación, utilizando altoparlantes a todo volumen; casi todos ellos estaban borrachos. En el transcurso se desató una pelea en la cual estos jóvenes intentaron dar muerte a uno de nuestros obreros, tratando de aplastarlo con un tractor, a la vez que proferían insultos. Al escuchar los gritos, varios integrantes de nuestro personal que se hallaban cerca, en nuestro hogar para víctimas del polio, salieron en su auxilio."

“La turba entonces - prosiguió dicho hermano - se armó de palos y piedras y comenzó a atacar a nuestros misioneros. Al escuchar la gran conmoción que se había originado, algunos estudiantes de la escuela bíblica salieron para ver qué estaba sucediendo, en consecuencia también fueron atacados con palos y piedras. Muchos resultaron heridos; cuatro de ellos de gravedad, y otros dos tuvieron que ser hospitalizadas.”

En este centro cristiano residen unas 100 familias y 900 niños, incluyendo víctimas de polio y huérfanos. Durante los tres días de sitio casi se habían terminado los alimentos básicos.

La persecución ha sido manifiesta de muchas maneras, pero nunca tan severa como ahora.  Unos misioneros del estado de Chhattisgarh informaron que durante varias semanas han estado trabajando en la construcción de una iglesia para una congregación muy pobre, y que, pese a sus esfuerzos, se ven constantemente obstaculizados por grupos hindúes extremistas y aún por la policía. 

Por favor, oremos por nuestros hermanos y hermanas de India, especialmente por aquellos que viven en estados o áreas en donde las leyes de anti-conversión y la influencia de los extremistas hindúes crean mucha oposición.  Recientemente el VHP (Vishwa Hindu Parishad, un grupo hindú extremista) pidió al gobierno federal que prohibiera todas las conversiones religiosas en India. Actualmente, cinco estados han aprobado leyes anti-conversión, y otros se están preparando para votar sobre esta cuestión. (Christian Aid)