En los últimos meses, los cristianos de Medio Oriente han estado formando milicias para luchar contra el Estado Islámico (EI) y otros grupos yihadistas, tanto en Irak como en Siria; incluso, mientras que el gobierno de Obama proporciona armas a los rebeldes, negándose a dárselas a las fuerzas cristianas.
En Irak, algunos de los pocos cristianos asirios que quedaron, han formado milicias bajo el nombre Dwekh Nawsha (que significa literalmente "abnegación" en el lenguaje nativo de Cristo, el arameo). La mayoría de estos combatientes proviene de entre los cristianos de la llanura de Nínive, que fueron desplazados debido a las atrocidades cometidas por el llamado Estado Islámico (EI) y ellos, además, están en la primera línea de lucha contra estos yihadistas.
Estas milicias cristianas se formaron poco después de que el ejército kurdo Peshmerga, apoyado por Estados Unidos, y que lidera la lucha contra el EI en la región, se retiró el verano pasado sin resistencia de muchos poblados cristianos, negándose a proteger a los cristianos del avance del EI, lo que llevó a las atrocidades ya habituales.
Según el Christian Science Monitor, "los cristianos han tomado las armas porque quieren proteger su propia tierra, y muchos ya no confían en que los kurdos puedan hacerlo por ellos". De hecho, los kurdos, incluso el Peshmerga, han sido conocidos por abusar y perseguir a los cristianos. Al igual que EI, los kurdos también son musulmanes sunitas.
"Nos quedaremos aquí, y los cristianos protegerán a los cristianos. Ni árabes ni kurdos protegiéndonos, sino cristianos", dijo el comandante local Fouad Masaoud Gorgees.
En la vecina Siria, hace poco, unos 500 combatientes sirio-cristianos se unieron y lograron evitar que el Estado Islámico entrara en el antiguo asentamiento cristiano de Sadad. No obstante, el 30 de octubre, fue capturada una ciudad a menos de cinco millas de distancia, dejando a Sadad vulnerable a ser atacado de manera continua.
Incluso el Patriarca de la iglesia siria ortodoxa, Ignacio Aphrem II, viajó a Sadad para elevar la moral de aquellos cristianos que se defienden. Aphrem dijo:
“Fue emotivo pero también muy alentador ver a nuestros jóvenes decididos a defender su tierra y permanecer en su patria. Verlos dispuestos a luchar y sacrificarse por su tierra, creo que eso es muy significativo y lo que me hizo sentir muy orgulloso de ellos.”
Hay una razón por la cual los cristianos están desesperadamente tratando de salvar Sadad de las garras del EI. Como un luchador sirio-cristiano lo expresó: "Sadad es para nosotros un lugar simbólico y no vamos a permitir que vuelva a caer".
Se refiere a los acontecimientos de octubre de 2013, cuando el Free Syrian Army (Ejército Libre de Siria), apoyado por Estados Unidos -que ampliamente se está promocionando como moderado, pero que de hecho, trabaja con el Frente Al Nusra de al Qaeda- capturó la ciudad. Hicieron un video gráfico de aquellos que mataron, llamándolos los "perros de Assad" -"perro" es un antiguo epíteto islámico para los cristianos- mientras que gritaban el grito de victoria del Islam, "Allahu Akbar" (que equivale para John McCain a una expresión cristiana como "gracias a Dios"), y elogiaban al Ejército Libre de Siria.
Durante la ocupación de Sadad, que duró una semana, la coalición moderada/radical torturó, violó y asesinó a 45 cristianos; los cuerpos de seis personas de una misma familia, que tenían entre 16 y 90 años, fueron encontrados en el fondo de un pozo (un destino cada vez más común para los "infrahumanos" cristianos).
En aquel momento, el Arzobispo sirio Selwanos Boutros describió a esto como "la mayor masacre de cristianos" de Siria. A pesar de ello, esta masacre fue totalmente ignorada por el gobierno de Obama y los principales medios de comunicación oficiales, en un esfuerzo por seguir con el “cuento” de que el Ejército Libre de Siria es "moderado."
En cuanto a las masacres de Sadad, el arzobispo había hecho estas preguntas en 2013:
“Hemos clamado por ayuda al mundo, pero nadie nos ha escuchado. ¿Dónde está la conciencia cristiana? ¿Dónde está la conciencia humana? ¿Dónde están mis hermanos?”
Los cristianos perseguidos en Oriente Medio, desde entonces, han aprendido bien que a la mayoría de los gobiernos occidentales -la administración Obama a la cabeza- les importa poco lo que pueda pasarles. Ellos sólo se preocupan por una cosa: el derrocamiento de Assad a cualquier precio; lo que incluye, directa o indirectamente, darles armas a aquellos terroristas islámicos que persiguen a los cristianos en las formas más horribles, como lo demuestran los asesinatos de aquellos que se niegan a renunciar a Cristo por Mahoma.
Sin embargo, a las verdaderamente "moderadas" milicias cristianas que luchan contra el Estado islámico se les niega las armas desde Washington: "Los grupos de presión en Washington DC están bloqueando armas y equipo para que no lleguen a Dwekh Nawsha, la fuerza de la milicia cristiana que ha estado luchando contra EI en las llanuras asirias de Nínive en Irak".
El teniente coronel retirado Sargis Sangari, un veterano de la guerra de Irak que sirvió durante 20 años en el ejército, dice: "Así como le están dando dinero a todas estas personas que se están matando unas a otras [los"terroristas" moderados], ¿por qué no intentan darles igualmente a los [cristianos] asirios?" Actualmente, su falta de recursos les impide lanzar una ofensiva. “Financiamiento, capacitación y equipamiento estadounidenses permitirían a estas milicias cristianas llevar adelante la lucha contra el EI”, agregó Sangari.
Todo esto supone que el liderazgo de Estados Unidos pretende actualmente que el Estado Islámico y otros yihadistas "moderados" sean derrotados en una ofensiva hecha por alguien. Una suposición que es dudosa.
Aún así, las súplicas de cristianos perseguidos no han caído totalmente en oídos sordos. Unos pocos cristianos occidentales, en su mayoría estadounidenses, han viajado a Oriente Medio para ayudar a los cristianos nativos del lugar, en la lucha contra los yihadistas.
Al ver que sus gobiernos, que poseen la capacidad militar para aniquilar al Estado Islámico, no hacen casi nada, ni siquiera ayudan dando armas a los cristianos, estos cristianos occidentales han decidido tomar sobre sí mismos la responsabilidad de luchar la buena batalla, a favor de los débiles y oprimidos.
Brett Felton, un ex soldado estadounidense que una vez sirvió en Irak, y que ahora se describe a sí mismo como un "soldado de Cristo", ha vuelto para ayudar a entrenar a Dwekh Nawsha contra el EI.
De acuerdo con este hombre de 28 años de edad, "aquí en realidad estamos luchando por la libertad de la gente... para poder vivir sin persecución, para mantener las campanas de las iglesias sonando".
Otro ex soldado estadounidense, Jordan Matson, que tiene las palabras "Cristo es el Señor" escritas en su chaleco, dijo: "Decidí que si nuestro gobierno no iba a hacer nada al respecto, yo sí iba a hacerlo... Estamos recibiendo disparos [por IS / yihadistas] prácticamente todos los días... No tenemos la tecnología como lo tiene el ejercito de Estados Unidos para poder vencer a nuestros enemigos".
Primero los cristianos de Irak y luego los de Siria imploraron a Occidente en busca de ayuda contra los perseguidores islámicos; los Estados Unidos desencadenaron este proceso deplorable al derrocar primero al hombre fuerte secular de Irak, Saddam Hussein, y ahora están yendo contra Bashar Assad en Siria.
Los cristianos brutalmente perseguidos fueron totalmente ignorados por el gobierno de los Estados Unidos y los medios de comunicación, aún cuando Obama y los medios ahora traten de manipular el corazón de los estadounidenses para que acepten cientos de miles de musulmanes [como refugiados]. [El mismo proceso se está observando en Alemania y muchos otros países europeos].
Entonces los cristianos imploraron al gobierno de Obama que, simplemente, dejen de darles armas a sus perseguidores. Cuando esto también entró por un oído y salió por el otro, los cristianos ampliamente superados en número y mal equipados se reunieron para combatir al Estado Islámico, con la esperanza de que EE.UU., que hace llover armas a la "oposición" rebelde, les ayude también, equipándolos contra el EI.
No se obtuvo ese logro. Como resultado de ello, unos pocos cristianos occidentales - que creen en la libertad religiosa - están arriesgando sus vidas para ayudar a sus hermanos de Oriente Medio contra el flagelo del EI.
A la luz de todo esto, no entender todavía de qué "lado" está el liderazgo de los Estados Unidos -que actualmente afirma estar del lado de la "democracia", la "libertad" y los "derechos humanos"- es ser más que ingenuo. Por Raymond Ibrahim
Fuente: http://www.raymondibrahim.com/muslim-persecution-of-christians/d-c-refuses-to-arm-persecuted-christians-fighting-isis/ o http://www.frontpagemag.com/fpm/260821/dc-refuses-arm-persecuted-christians-fighting-isis-raymond-ibrahim - 18.11.2015; Redacción: VM-Ar 23.11. 2015
Comentario 1:
A pesar de lo contradictorio que parezca que los cristianos se enfrenten con armas a otros grupos armados, la extrema violencia que se vive en estos lugares del mundo los ha obligado a tomar estas medidas.
Lo más destacable de todo esto es el hecho de que cristianos de otras partes lo arriesguen todo para ayudar a aquellos que no tienen ninguna otra ayuda. Por lo visto, el gobierno de EE. UU. tiene sus propios intereses y sólo se ocupa en conseguir lo que quiere, sin tener en cuenta a nadie más. M.B. de Argentina, 23.11.2015
Comentario 2:
En este asunto se mezclan dos realidades: por un lado, la persecución a los cristianos; y, por el otro, la defensa del territorio de un país, que está siendo ocupado o invadido por terroristas que se autoproclaman un nuevo Estado Islámico.
Todos sabemos que, como cristianos, no podemos vengarnos de nuestros enemigos. Pero aquí hay otra cuestión; y es la defensa de la patria. ¿Qué haríamos nosotros, si un país o un pretendido nuevo estado intenta invadir nuestra patria, nuestro territorio? Pues, el presidente del país convocaría a los soldados a las armas; ateos, cristianos o de cualquier religión. A menos que fuesen los llamados ‘Testigos de Jehová’, que no aceptan transfusiones de sangre, ni juramentos, ni honrar la bandera, ni tomar las armas, los demás patriotas saldrían a defender a su país.
Hay otra cuestión a tomar en cuenta, que explica por qué motivo también, los cristianos en Siria son especialmente perseguidos, combatidos y exterminados: como ellos gozaban de una limitada libertad religiosa con el actual presidente de Siria, Bashar al-Asad, los terroristas consideran que los cristianos son aliados del presidente y enemigos naturales de quienes quieren derrocarlo. M.A.N. de Buenos Aires, 25.11.2015
Comentario 3, desde Colombia:
El autor de este escrito utiliza el Antiguo Testamento muy audazmente para explicar su punto de vista defendiendo la guerra, y es cierto; no voy a negar que el Dios de los ejércitos en el Antiguo Testamento, tenía otra forma de tratar en el contexto de la torah “el pecado”; por eso ordenó al pueblo de Israel destruir totalmente a los pueblos paganos e idólatras que estaban a su alrededor, vemos innumerables guerras y muertes a nombre del Señor producto de sus ordenanzas. El pueblo de Israel, siendo un pueblo sometido a las leyes de Dios obedecía ciegamente sus mandamientos.
Cuando Dios hablaba no era algo de negar o desconocer su mandato, pues lo único verdadero era su total obediencia, por ejemplo, cuando Dios ordenó a Saúl destruir todo: “Ve, pues, y hiere a Amalec, y destruye todo lo que tiene, y no te apiades de él; mata a hombres, mujeres, niños, aun los de pecho, vacas, ovejas, camellos y asnos” 1Sam 15:3; conocemos que Saúl destruyó el pueblo de Amalec pero le permitió vivir, y también se quedó con lo mejor de sus rebaños, por lo tanto el Señor lo desechó, tal como este mandato, se da en evidencia que el Señor permitía la guerra solo para la supervivencia y la prosperidad de su pueblo. Esta era la forma tratar Dios con el pecado y el pecador.
Pero en el Nuevo Testamento, con la llegada de nuestro Señor Jesucristo, vimos cómo su misericordia se extendió a todo pueblo y nación, permitiéndonos a nosotros, los que antes éramos hijos de desobediencia, ser reconciliados con Dios por su sangre.
Ahora el amor de Dios se ha extendido por todo el mundo y a toda criatura, para que todo aquel que crea en El sea salvo. Es por medio del arrepentimiento que podemos tener la salvación, la cual Dios nos da por gracia y bondad. Por lo tanto, toda criatura tiene la oportunidad de llegar a ser hijo de Dios, y no podemos realizar juicios sin saber si Dios tenga misericordia de las personas.
Por lo tanto, Dios nos dio mandamientos para que podamos llegar a los pies del Señor, como el predicar el evangelio, como el tener misericordia, como el abundar en el amor y buen testimonio; esto lleva a muchos a querer gozar de este don preciado de la salvación. Es por eso que Dios nos manda a ser diferentes del mundo y no hacer lo que el mundo hace, ya que el mundo está lleno de: enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, envidias, homicidios nombrando algunas obras de la carne cuando deberíamos estar llenos de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza, que son frutos del Espíritu Santo y eso por motivo de que somos linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciemos las virtudes de aquel que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable.
No desconozco la ira de Dios, pero debemos ser prudentes, porque este es un atributo propiamente del Señor, no como lo enseña el autor, que tenemos que desatar nuestra ira contra el impío porque Dios está airado contra ellos, debemos dejarle la venganza al Señor, El dará el pago, hay que recordar sus promesas y sus advertencias: aquel que hace lo malo Dios lo castigará con fuego y aquel que hace lo recto, Dios lo recompensará con el reino de los cielos como su morada. Por lo tanto, tenemos que tener muy claro que Dios es soberano y que tiene la potestad sobre todas las cosas y personas.
Entonces la pregunta que le hago al autor es ¿si realmente cree que nuestro Señor Jesucristo ha mandado a que hagamos guerra o participemos de ella? Y mi respuesta es no, sus enseñanzas se enfocan más a lo espiritual que a lo carnal, queriendo decir que la guerra que tenemos no es de ninguna manera carnal, sino espiritual contra principados, potestades, gobernadores de las tinieblas y huestes espirituales de maldad en las “regiones celestes”; no sé de dónde el autor saca sus argumentos, a no ser que mencione el antiguo pacto, porque en el nuevo testamento no hay mención de guerra de cristianos, y esto se debe a que no es una enseñanza de nuestro Señor Jesucristo; y si fuera como el autor pretende explicar entonces veríamos ejemplos como en el Antiguo Testamento, tal vez un Pablo siendo guerrero y perseguidor de la iglesia Cristiana y torturador y asesino de muchos cristianos. En el momento de su conversión no fue tras los judíos perseguidores para darles muerte, pagándoles con la misma moneda, sino que convertido fue perseguido, e huía de un lugar a otro; o tal vez Pedro, después de la llenura espiritual en el día de Pentecostés, hubiera ido en contra del ejército romano para darles muerte. Por el contrario, después de la conversión de los discípulos, vemos un cambio radical; anteriormente, en su pensamiento judío y con base a sus costumbres, era fácil ver a Jacobo y a Juan pedirle permiso al Señor para que pudieran ellos hacer que descendiera fuego del cielo, y consumiera a los samaritanos. Y el Señor los reprendió diciéndoles que el no había venido a destruir las almas si no a salvarlas, o tal vez a Pedro queriendo herir al siervo del sumo sacerdote Malco con su espada, a lo que el Señor lo reprendió igualmente. Vemos como al Señor le costó trabajo quitar este pensamiento guerrerista de los apóstoles y su labor culminó con la promesa del Espíritu Santo, la cual transformó a los apóstoles en un nuevo ser no viciado a sus costumbres antiguas, sino guiados por el Espíritu Santo.
Se nos ha olvidado el privilegio tan grande que es para un cristiano morir por Cristo; los apóstoles se gozaban cuando los encarcelaban, los vituperaban, escupían y azotaban y cantaban alabanzas al Señor felices de ser dignos de recibir las marcas del Señor.
En un libro escrito por David Bercot se menciona escritos de cristianos primitivos anhelando estar en algún momento dentro del coliseo romano muriendo por la causa de Jesucristo; es más, Dios da un gran galardón a los mártires, es por eso que pienso que no se debe permitir que los cristianos se armen jamás, si no, que oren y oremos por sus vidas, testificando una vida de amor y de buenas obras, siendo pacificadores y reconciliadores, armándonos de fe, de oración y de la palabra de Dios, que es la espada del Espíritu Santo. Y confiando en las promesas de Dios, vida eterna y gozo perpetuo en el “reino de los cielos”.
O. F. G.
Comentario 4 para comentar el comentario 3:
En referencia al régimen del Antiguo Testamento O.F.G. dice que 'el Dios' de los ejércitos tenía otra forma de tratar el pecado. RESPUESTA: ¡No es el Dios de los judíos y de la religión judía, como si fuera otro Dios! Es el mismo Dios del Nuevo Testamento.
O.F.G. dice que los judíos obedecían al 'Dios de los ejércitos' ciegamente y que estaban sometidos a sus leyes. RESPUESTA: ¡La fe de los judíos es nuestra misma Fe! Sólo que ellos no han reconocido al Señor Jesús como el Mesías que todavía están esperando. El Dios de los judíos es mi Dios; el dios de los musulmanes NO es mi dios.
O.F.G. dice que el Señor permitía la guerra sólo para la supervivencia y la prosperidad de su pueblo. RESPUESTA: Si vemos lo que sucede con los cristianos ahora en Siria e Irak, es solamente por su supervivencia; ni siquiera para su prosperidad.
En referencia al régimen del Nuevo Testamento O.F.G. dice que, dado que todas las personas tienen la oportunidad de ser salvos, no podemos realizar juicios contra ellos, pues estaríamos privándoles de la oportunidad de ser salvos y que Dios cumpliera en ellos el tener misericordia. RESPUESTA: ¿Qué haremos entonces? cuando en Romanos 13.3-5 dice: "... los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo. Por lo cual es necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia”.
La misma Escritura afirma que los magistrados son servidores de Dios, que NO en vano llevan la espada como vengadores, para CASTIGAR al que hace lo malo. Y no sabemos si con el tal que estaba en ese momento haciendo lo malo y fue muerto, Dios iba a tener misericordia del tal e iba a salvarlo.
O.F.G. dice que no desconoce la ira de Dios, pero que hay que ser prudentes, porque la ira es un atributo propiamente del Señor. RESPUESTA: Aquí NO se trata de la ira del hombre contra otro hombre; se trata de una cuestión de supervivencia, tal como fue mencionado antes.
O.F.G. dice que nosotros no debemos hacer como el autor enseña, en cuanto a que nosotros tenemos que desatar nuestra ira contra el impío. RESPUESTA: En ningún momento se advierte tal enseñanza en el autor; el cual se remite a transmitir lo que los mismos damnificados por los terroristas están testificando: no ira ni odio sino, supervivencia.
O.F.G. dice que a aquel que hace lo malo, Dios lo castigará con fuego y a aquel que hace lo recto, Dios lo recompensará con el reino de los cielos como su morada. RESPUESTA: Vale señalar que la Salvación NO es por nuestros méritos o rectitud; ya que todos somos como suciedad delante de Dios: "Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite". (Isaías 1.6). "...todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia". (Isaías 64.6).
O.F.G. dice que en el Nuevo Testamento no hay mención de guerra de cristianos; y esto se debe a que no es una enseñanza de nuestro Señor Jesucristo; y si fuera -como el autor pretende explicar- entonces veríamos ejemplos como en el Antiguo Testamento. Sin embargo, en Apoc.9.7: "El aspecto de las langostas era semejante a caballos preparados para la guerra; en las cabezas tenían como coronas de oro; sus caras eran como caras humanas". En Apoc.11.7: "Cuando hayan acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, y los vencerá y los matará". En Apoc. 12.17: "Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo". En Apoc.13.7: "Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación". Esto está en el Nuevo Testamento y habla de los santos, de los que dan testimonio, de los descendientes de la mujer. ¡Habla de guerras y no son espirituales! Notemos que la guerra física será contra los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. Dice que los santos serán vencidos; no podrían ser vencidos sin haber ofrecido resistencia. De lo contrario, sería lisa y llanamente una masacre y un holocausto. Los judíos en Alemania no podían defenderse; pero los judíos en Israel sí se defienden.
Señalar como ejemplos a Pablo y a Pedro es un absurdo, ya que ambos no estuvieron en una guerra; eran el vivo testimonio del poder del Evangelio. Citar el caso de Malco o de Juan y Jacobo también es un absurdo, ya que tampoco estaban en medio de una guerra; y sus intenciones no eran la supervivencia.
¡Claro que es un privilegio morir por Cristo! Cuando ya no queda otra alternativa; pero poner nuestra cabeza en la guillotina porque sí, es una necedad. No somos llamados a ser héroes ni mártires sino, a ser testigos. Ahora, si por ser testigos fieles no nos queda otra que morir por Cristo, esto sí es loable. Pensemos por un momento en el mencionado apóstol Pablo. Cuando supo que lo querían matar fue descolgado del muro de la ciudad de Damasco en una canasta. ¿Por qué mejor no entregarse y morir y ser un mártir? Porque, si uno puede escapar del peligro, lo hace; a menos que escapar signifique almas que se perderán para siempre.(Hechos 16.28). ¿Por qué los cristianos cruzan ríos torrentosos, huyen de las cárceles, escapan a otros países, utilizan el servicio de espías para salvar su vida, como lo hizo Pablo? (Hechos 23.16-22). Esto se debe a que no somos llamados a morir sino, a dar testimonio. Ahora si por causa de dar testimonio debemos experimentar la muerte, esto es ganancia. (Filipenses 1.21).
Estoy seguro que O.F.G. daría su vida defendiendo a su novia, esposa o hija, de la intención malvada de un perverso que quiera violarlas o secuestrarlas; utilizaría sus puños y aun algún instrumento contundente, para defender a su amada; incluso, siendo cristiano y habiendo sido instruido de que es su deber amar a sus enemigos, bendecir a los que lo maldicen, haciendo el bien a los que lo aborrecen, y orando por los que lo ultrajan y persiguen. (Mateo 5.44). Pues, ¡esto mismo es lo que sucede entre los cristianos y los DAESH! Ellos toman a tu novia, o a tu esposa o a tu hija, con la intención malvada y perversa de secuestralas, violarlas y hacerlas esclavas sexuales. ¡Cobarde de nuestra parte sería quedarnos de brazos cruzados, mientras se llevan a nuestra amada, no intentando hacer nada por nuestra parte! Claro, si no tenemos forma de defendernos y toda nuestra familia incluido nosotros quedamos a merced del enemigo, no nos queda otra alternativa que ser fieles hasta el fin, dando nuestra vida por el Señor, sin negar Su Nombre. Y es seguro que recibiremos la Corona de la Vida. (Apocalipsis 2.10). M.A.N. de Buenos Aires, 3.12.2015
Comentario 5:
Muy importante el artículo y la información, nunca supe que opinar al respecto de la autodefensa a estos niveles, pero es imposible estar contra quienes nos defiendan visto el exterminio y la crueldad de los islamistas. DIOS OS BENDIGA MUCHO.
Victorio, 14.12.2015, España
Gracias por todos estos comentarios, que sirvan de inspiración para muchos otros hermanos para pensar con profundidad sobre estos temas candentes.
Que Dios bendiga a cada uno.
Alberto
Hijitos, ya es el último tiempo; y como vosotros habéis oído que el anticristo ha de venir, así también al presente hay muchos anticristos; por lo cual sabemos que es el último tiempo (1Jn. 2:18).
¡Permanezcamos en oración!