La primavera árabe ha demostrado ser mortal para los cristianos de todo Medio Oriente. Muchos de los líderes derrocados en países como Libia, Yemen y Egipto, habían mantenido a los grupos islamistas radicales en jaque.
Ahora, en lugar de la democracia, el rostro de esta región es una mayor opresión causada por la batalla de los musulmanes fundamentalistas en su lucha por el poder.
Los cristianos sirios han apoyado al régimen de Assad, ya que ha protegido a las minorías religiosas en los últimos años, pero esos días pueden estar llegando a su fin. Muchos analistas creen que a medida que se debilita el régimen, en realidad se fortalecen los islamistas radicales. En las llamadas zonas liberadas de Siria en el norte y en otros lugares, se está imponiendo la Sharia, la ley islámica. Eso es lo que pasó en Egipto, cuando la Hermandad Musulmana tomó el control del gobierno.
Y a pesar de que la intervención del ejército egipcio ha debilitado a la agrupación, los partidarios del derrocado presidente islamista Mohamed Morsi, todavía causan estragos en contra de los cristianos en el sur.
Shaak Sadek Shenouda, un guardia de seguridad en una iglesia anglicana, dijo que cientos de miembros de la Hermandad Musulmana cargando armas rodearon el edificio. “La iglesia estaba rodeada por todos los costados y la gente que rodeaba la iglesia estaba armada”, explicó Shenouda.
En la ciudad cristiana de Dalga, los partidarios de Morsi destruyeron un monasterio y sus hermosas puertas antiguas, y quemaron otras cuatro iglesias cercanas. En total, unas 130 iglesias, en su mayoría coptas, fueron atacadas.
En Dalga, la Hermandad Musulmana ha comenzado a imponer un impuesto a los cristianos. Se llama “impuesto jizya”; es el dinero o tributo que los conquistados no musulmanes han tenido que pagar históricamente a sus amos islámicos como señal de sumisión voluntaria y muestra de humillación, para que sus vidas y sus propiedades sean preservadas sin que ellos tengan que convertirse al islam.
Esto ya comenzó a suceder en Siria, luego de que las tropas rebeldes tomaran el control de la ciudad cristiana más antigua del mundo, Maalula. Testigos informaron que, por ejemplo, a los propietarios de una tienda cristiana les dieron tres opciones: pagar $70.000 como impuesto jizya, convertirse al Islam o morir.
Rebeldes sirios están luchando en la actualidad en las afueras de Maalula. Informes recientes indican que tres cristianos fueron asesinados, al intentar huir de la violencia.
Fuente: Mundo Cristianotv/ 13.10.2013, Editado por Iglesia En Marcha.Net y VM-Ar