Dios se ríe de la Rebelión del Hombre

La Biblia profetiza una rebelión sin precedentes en los últimos días y dice que Dios se ríe de ella. Una profecía de hace 3.000 años describe exactamente lo que está sucediendo hoy. Hay un frenesí global en los niveles más altos de la sociedad para rechazar a Dios y su gobierno moral. Un profeta describió cómo los gobernantes conspiran contra Dios para romper Sus "cuerdas", refiriéndose, por ejemplo, a sus leyes sobre el matrimonio, la distinción de los sexos, etc.

Podemos ver esta parte de la profecía cumplida ante nuestros ojos, pero la profecía va mucho más allá y nos dice también lo que Dios hace en respuesta: El se ríe de la ridícula rebelión del hombre insignificante contra su Creador Todopoderoso, hombre quien entra en este mundo como un niño indefenso, vive unos años y luego cae en la eternidad por medio de una muerte que no puede controlar. 

Por el otro lado Dios ama al hombre y ha provisto a un gran costo su salvación por medio de Jesucristo; pero se ríe de la conspiración del hombre contra Su omnipotencia. Cristo regresará para juzgar el pecado y establecer el reino de Dios en la tierra, y nada puede detenerlo.

La profecía termina con un llamado a los hombres a confiar en Jesucristo antes de que sea demasiado tarde; esto incluye la promesa de salvación para aquellos que confían en Él. Aquí está la profecía:

“¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan vanidad? Se levantan los reyes de la tierra, y los príncipes consultan unidos contra Jehová y contra su ungido, diciendo: Rompamos sus coyundas, y echemos de nosotros sus cuerdas.

“El que mora en los cielos se reirá; el Señor se burlará de ellos. Entonces hablará a ellos en su furor, y los turbará con su ira. Pero yo he puesto a mi Rey sobre Sión, mi santo monte. Yo publicaré el decreto: Jehová me ha dicho: Mi Hijo eres tú; yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por heredad las naciones, y por posesión tuya los confines de la tierra. Los quebrantarás con vara de hierro; como vaso de alfarero los desmenuzarás.

“Y ahora, reyes, entended: Admitid corrección, jueces de la tierra. Servid a Jehová con temor, y alegraos con temblor. Besad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino, cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en Él confían” (Salmo 2:1-12).

Fuente: Way of Life News 3.7.2020

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